Saltar al contenido

El proceso terapéutico

noviembre 23, 2020
El Proceso terapéutico
Comparte si te ha gustado ;)

Según Rogers, el cliente es el que lleva el peso de la terapia (auto-directividad) y no el terapeuta. Sin embargo, el terapeuta tiene que ofrecer al cliente una relación que se define por tres condiciones necesarias y suficientes para lograr el éxito de la misma. Las tres primeras características o condiciones son Empatía, Aceptación positiva incondicional y Autenticidad o Congruencia.

Todo el proceso de la psicoterapia puede traducirse como la actitud del psicoterapeuta en una profunda creencia de respeto y aceptación del cliente y de sus propias capacidades para el cambio. De este modo, todo lo que se hace en la psicoterapia es la instrumentalización de esa actitud. Estas tres condiciones relacionales mencionadas son llamadas actitudes de base:

  • La aceptación y consideración incondicionalmente positiva de la persona en búsqueda de ayuda:

Se acepta sin condición alguna la manera en que ella está dispuesta a revelarse y demostrarse en la terapia.

  • La empatía centrada en la persona sufriente:

Es la capacidad del terapeuta de entrar en el mundo del cliente y de comprender con exactitud sus vivencias como si el terapeuta fuese el otro. Esta comprensión empática facilita la concientización, favorece el acompañamiento terapéutico y promueve el desarrollo personal.

  • La autenticidad o congruencia del terapeuta permite a menudo un diálogo sincero y constructivo directo entre el terapeuta y el cliente:

El terapeuta sigue siendo un experto, pero él se comunica también como ser humano al servicio del cliente sufriente. La relación centrada en el cliente se define además por un mínimo de contacto establecido entre el cliente y el terapeuta. El cliente debe estar en un estado de incongruencia y por último, el cliente debe, de una manera u otra, darse cuenta de la presencia del terapeuta y de la relación ofrecida. Una relación definida por las actitudes de base genera una multitud de interacciones terapéuticas cada vez más adaptadas a la relación con el cliente, a su persona y situación particular. Favoreciendo la capacidad natural e inherente en cada persona de poder desarrollarse de manera constructiva (tendencia natural de cada persona a su auto-actualización).

También te puede interesar Terapia Psicológica Positiva.
Te invitamos a conocer nuestros Cursos de Psicología Online.